Escena 1/Interior.
Cuarto de una casa situada en la montaña/ podría ser una chocita frente al mar también.
Una joven despierta con el canto lejano de un ruiseñor. Se estremece en la cama y se dirije hacia la ventana. Como todos los días, la sensación es que hoy es el último o el primer día de su vida, la liviandad de su ser lo confirma. La incertidumbre no le preocupa, su querer está a flor de piel, guía sus pasos. Abre las cortinas, para llenarse de luz. Abre la ventana y siente como entra el aire de montaña/mar; algo dentro suyo se regenera.
Sí, esta imagen podría ir perfectamente.
